NEW YORK NEW YORK, siempre diferente, siempre igual.
NUEVA YORK, EU, sep. 6, 2013.- En la multitud de desfiles y presentaciones de la Semana de la Moda en Nueva York, un show modesto ha provocado mucho interés, ya que hace entrar por primera vez en el Lincoln Center una línea para las mujeres "rellenitas".
En el universo ultradelgado de la Fashion Week, en el que los talles XXS son la norma, Eden Miller, una creadora neoyorquina con curvas bien asumidas, presentaba seis modelos voluptuosas para una mini colección colorida dominada por el estampado.
Diseñadora de moda desde hace 25 años, Miller lanzó su marca Cabiria en abril pasado.
En julio, cuando pensaba cómo continuar su proyecto tras unos primeros resultados "buenos", fue contactada por el Fashion Law Institute, que aconseja y ayuda a creadores talentosos que no tienen los medios para organizar desfiles solos.
Apasionada, explica sin abandonar una inmensa sonrisa cómo trabaja los cortes, las siluetas, siempre con el espíritu de destacar el cuerpos de las mujeres que se le parecen.
"Está diseñado para ellas, pensando en ellas. Y ellas se sienten bellas, y eso me motiva y me hace pensar en grande", agrega.
"Sólo me di cuenta más tarde que Cabiria iba a ser la primera colección de grandes talles en ser presentada en el Lincoln Center", señala, orgullosa de hacer historia "por accidente".
A Eden Miller, cuya colección está destinada a los talles M al XXL, le gustan los estampados y no se priva de ellos.
"Si se es 'relllenita' no vale la pena pretender que se es delgada. Un estampado con motivos pequeños no funcionará. Más vale un estampado que sea proporcionado con su talla", afirma.
Miller tiene unos 50 tatuajes, entre ellos un murciélago, una rata, dos mariquitas y un escarabajo en los brazos, y serpientes en las pantorrillas. "Me gustan los animales", explica riendo.
"Espero verdaderamente que las colecciones con la calidad para estar en la Fashion Week, pero excluidas hasta ahora por estar destinadas a mujeres 'rellenitas', sean invitadas" en el futuro, como las otras, dijo Miller.
En Milán, esto ya ocurre desde hace varios años con los desfiles de Elena Miro.
